Boca Juniors empató sin goles esta noche en su visita a Unión de Santa Fe por la 23ra. fecha del campeonato de la Liga Profesional, que contó con otro polémico arbitraje de Andrés Merlos, quien le anuló un gol al capitán del conjunto local, Claudio Corvalán.
El empate dejó al «Xeneize» en la undécima posición con 32 unidades, mientras que el local quedó en el 24to. lugar con 24 puntos, al igual que Vélez, Independiente, Atlético Tucumán, Colón y Banfield.
El desarrollo del partido fue parejo desde el inicio con dos equipos que no se sacaron diferencias marcadas: Boca tuvo un poco más la pelota, pero sin ser profundo, mientras que el «Tatengue» la tuvo menos aunque intentó ser más vertical que su rival con remates que hicieron poner en acción a «Chiquito» Romero en varias oportunidades.
Un córner desde la derecha le dio al «Xeneize» la primera y única chance clara de la primera etapa tras un cabezazo de Nicolás Valentini que pasó apenas desviado del palo derecho del arco defendido por el arquero
El equipo conducido por el entrenador Cristian González tuvo a Kevin Zenón como el jugador más destacado con las subidas por el sector izquierdo, zona del campo en la que Unión llegó mayor cantidad de veces al campo rival.
El «Tatengue» pudo ser más efectivo con algunos disparos de media distancia y de jugada colectiva, pero no pudo ser contundente por falencias en la definición y por la buena tarde del «Uno» Romero.
Los dirigidos por el entrenador Cristian «Kily» González, por su parte, manejaron un poco más la pelota, pero no fueron claros de mitad de cancha hacia adelante para capitalizar esa posición en opciones claras de peligro.
El segundo tiempo comenzó con una clara polémica tras la anulación del gol del defensor de Unión Claudio Corvalán a instancias del VAR por una supuesta posición fuera de juego.
El desarrollo del encuentro durante los primeros minutos de la segunda etapa lo volvió a tener a la visita con mayor control de pelota, pero sin llevar peligro al arco de Sebastián Moyano, mientras que Unión apeló a la firmeza defensiva y no pudo salir rápido para incomodar a Romero.
Con el correr de los minutos, los santafesinos se soltaron, comenzaron a manejar la pelota y se acercaron con mayor peligro al área rival aunque sin poder concretar ninguna jugada a su favor.
Los dirigidos por el técnico Jorge Almirón se mostraron desconcertados, sin ningún futbolista que se hiciera cargo de la generación de juego y además no crearon ninguna jugada de peligro en el arco de Moyano.
El tramo final del partido fue todo del «Tatengue» que tuvo la mente puesta en el arco rival, controló la pelota, intentó variantes ofensivas y marcó el ritmo ante la pasividad de Boca que dejó una pálida imagen en su visita a Santa Fe, con Sergio Romero como figura.
En la próxima jornada (24ta.) Boca recibirá a Huracán, mientras que Unión visitará a Talleres de Córdoba.