El ministro dijo que la cuota de este mes se pagará con una canasta de yuanes, crédito de la CAF y otras fuentes. El monto del desembolso fue
En un breve contacto con los periodistas que cubren su gira por el norte del país, Sergio Massa anticipó que el FMI acordó enviar desembolsos por 7.000 millones de dólares en la tercer semana de agosto.
A las 6:25 de este viernes Massa mantuvo un zoom con autoridades del Fondo. En esa conversación se terminó de cerrar el número de los desembsolsos, que anticipó en exclusiva LPO la semana pasada. Serán 7.500 millones en la tercer semana de agosto y cerca de 3.000 en la primera de noviembre.
El monto del acuerdo de alguna manera refleja la vorágine del último tramo de la negociación hasta la madrugada. Massa les dijo a los periodistas que el primer desembolso iba a ser de 7.000 millones y luego el FMI anunció que será de 7.500 millones.
El acuerdo concede a Massa dos exigencias centrales: el anticipo de los desembolsos de todo el año y la posibilidad de usar una parte para intervenir en el mercado cambiario si hay corridas. Esto último contradice todos los precedentes del Fondo y es un triunfo importante del ministro que logró convencer a los técnicos del organismo que en la Argentina, a diferencia de la mayoría de los países, la suba del tipo de cambio dispara la inflación.
La magnitud del desembolso más la capacidad de intervenir le dan herramientas al ministro para frenar la volatilidad del tipo de cambio de estos días, ante un mercado que ya estaba en modo show me the noney.
Massa también confirmó que ahora se pagarán los vencimientos por 3.000 millones de dólares de fin de este mes con una canasta que incluye yuanes, fondos de la CAF y otras fuentes. O sea, primero se paga y luego llega el desembolso.
La inminencia del acuerdo se filtró este jueves por la noche por medio de una nota de Reuters de un periodista indio de Bangalore y fue confirmada a LPO de manera implícita por un importante funcionario de Massa: «Estén atentos este viernes».
En efecto, a la medianoche, del jueves Massa tuvo otro zoom desde San Juan con Luis Cubbeddu, jefe de la misión del Fondo para la Argentina y con su jefe, el chileno Rodrigo Valdez, titular del Departamento del Hemisferio Occidental del organismo.
Esa comunicación fue interrumpida varias veces porque el venezolano y el chileno pedían tiempo para hacer consultas, se supone que con la titular del Fondo, Kristalina Georgieva.
Massa negoció hasta las 2:20 de la madrugada acompañado por su jefe de asesores, Leonardo Madcur. A las 6:25 se retomó el zoom con los funcionarios del Fondo y a las 8:30 ya estaba el documento que contenía el acuerdo. No fue casual la presencia del ex campeón hípico en el tramo final de las negociaciones: Madcur desempeñó un rol similar junto a Guillermo Nielsen durante la renegociación de la deuda en el gobierno de Néstor Kirchner.
Ahora falta la que se conozca el staff-level agreement que contendrá los términos del acuerdo y luego lo apruebe el directorio del organismo, que es el que se reuniría a mediados de agosto. El problema es que la semana que viene el FMI entra en sus sagradas vacaciones de verano y mucho se especuló que ese receso impediría tratar el caso argentino.
Massa buscó disipar explícitamente esos temores, esta mañana en su contacto con los periodistas. «Quiero aclarar que porque que haya 15 días de receso formal no significa que el board y el staff no siga trabajando, porque hoy en el mundo en el que vivimos la gente tiene teléfonos celulares, computadoras, se reúne de manera virtual. Leí en algunas noticias que decían estos 15 días se apagaba el Fondo», dijo con ironía.
El ministro destacó además la cláusula que más le costó conseguir. «Para el común de la gente lo que tiene que tener es la tranquilidad de que una de las cosas que aprueba el staff es la facultad y capacidad de intervención del Banco Central en los momentos en los que aparezcan situaciones de turbulencia».
«Eso lo que permite es que los dólares financieros que de alguna manera son una preocupación para quienes producen y para quienes tienen que mirar su perspectiva de precio y de rentabilidad y que la acumulación de reservas que para quienes importan y necesitan bienes intermedios importados para poder trabajar y producir, tengan un mecanismo de estabilidad», agregó.
Para llegar a este acuerdo, Massa tuvo que instrumentar una devaluación sui generis de suba de impuesto país a las importaciones y nuevo dólar agro que fue anticipada en exclusiva por LPO.
El objetivo real del Fondo es asegurarse que Argentina sume reservas para que les pague su deuda. Por eso favorece el cepo y la devaluación y ahora también empezó a presionar para que se reduzcan las importaciones. El costo de esas medidas es recesión y más inflación, pero esos problemas son secundarios para el organismo. Por eso, fue tan importante para Massa lograr que le permitan usar dólares para intervenir en el mercado.
En su doble rol de ministro y candidato, antes de enfrascarse en el tramo final de la negociación con el Fondo, Massa compartió una cena con el gobernador Sergio Uñac y la primera plana del peronismo sanjuanino. «Las derrotas fortalecen. Yo tengo muchas derrotas sobre el lomo. Ahora hay que ganar la elección», arengó Massa a los sanjuaninos, que venían de capa caída por la reciente derrota en manos de Juntos.
FuenteLPO