El impacto de la recesión en la economía argentina se ha hecho evidente en los primeros meses de la gestión de Javier Milei, con un marcado aumento en el nivel de desocupación. Según el informe «Mercado de Trabajo» publicado por el INDEC este lunes, el desempleo ascendió al 7,7% en el primer trimestre de 2024, comparado con el 5,7% del último trimestre de 2023 y el 6,9% del mismo período del año pasado.
El informe del INDEC destaca cómo la recesión, impulsada por la aceleración de la inflación y la disminución del poder adquisitivo de los salarios, ha afectado negativamente el mercado laboral. Este aumento en la desocupación es el más alto desde el tercer trimestre de 2021, durante la recuperación post-pandemia.
«En el primer trimestre de 2024, la tasa de actividad -que mide la población económicamente activa (PEA) sobre el total de la población- alcanzó el 48%, la tasa de empleo -que mide la proporción de personas ocupadas con relación a la población total- se ubicó en 44,3%; y la tasa de desocupación -que mide a las personas que no tienen ocupación, están disponibles para trabajar y buscan empleo activamente, como proporción de la PEA- se ubicó en 7,7%,» analizó el INDEC.
Esta tasa de empleo de 48% contrasta con el 48,3% registrado un año antes. En el mismo período de 2023, la tasa de empleo fue del 45%. Además, el indicador de Ocupados demandantes de empleo aumentó del 14,8% al 16%, y la subocupación creció del 9,4% al 10,2%.
La caída en la construcción ha sido uno de los factores más significativos en la pérdida de empleos durante los primeros meses del gobierno de Javier Milei. Desde su asunción, casi 100,000 puestos de trabajo se han perdido.
Un informe reciente de la Secretaría de Trabajo, basado en datos del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA), reveló que en los primeros cuatro meses del nuevo gobierno, aproximadamente 95,000 asalariados registrados del sector privado perdieron sus empleos. Las estimaciones indican que esta tendencia negativa continuó en abril.
Luis Campos, investigador del Instituto de Estudios y Formación de la CTA Autónoma, analizó los datos oficiales y señaló: «Si sumamos la caída en el sector público (21,700 trabajadores menos) y en casas particulares (9,500 trabajadoras menos), estamos hablando de 126,000 personas que perdieron su trabajo registrado en cuatro meses.»
Campos añadió que el retroceso en el sector privado registrado comenzó en septiembre de 2023, acumulando siete meses de caída continua, resultando en 127,000 trabajadores menos. «Volvimos a niveles similares a los de fines de 2015,» afirmó, y describió el patrón de los últimos cuatro meses como un desplome en la construcción, una caída en la producción de bienes y servicios, y un crecimiento en el sector primario (agro, pesca y minería).
La Secretaría de Empleo también destacó hace unos días el efecto negativo de los primeros meses del mandato del gobierno libertario en el mercado laboral, registrando una pérdida de 127,000 puestos de trabajo en el sector privado durante los últimos siete meses.
Estos datos reflejan la profunda crisis laboral que atraviesa el país y el desafío que enfrenta el gobierno de Javier Milei para revertir esta tendencia y estabilizar el mercado de trabajo