Si el Gobierno no pospone la suba del impuesto a los combustibles prevista para el 30 de junio, la actualización del tributo será del 115%, impactando directamente en el surtidor con un aumento del 18% en la Ciudad de Buenos Aires.
De implementarse, el litro de nafta súper en Buenos Aires subiría a $1068. Esta decisión, aún no confirmada, podría ser ajustada para mitigar el impacto inflacionario, dado que los períodos de mayor inflación se actualizarían en un solo mes.
El Gobierno ya ha postergado previamente esta actualización mediante los decretos 375/2024 y 466/24, pero el nuevo decreto estipula que las actualizaciones por la inflación del cuarto trimestre de 2023 y el primer trimestre de 2024 se realicen a partir del 1 de julio.
El impuesto, que actualmente es de $143 por litro, subiría a $306 por litro. Este tributo se actualizará trimestralmente en enero, abril, julio y octubre, según la ley 23.966.
El Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) indica que el tributo mantuvo su valor real entre abril de 2018 y marzo de 2021, pero luego descendió por la falta de actualización y la inflación. En enero de 2024, el valor real del tributo fue mínimo ($42), comenzando un proceso de recuperación que podría llevarlo a $294 en julio.
Este ajuste permitiría recuperar el valor real promedio del periodo entre 2018 y 2021, quedando un incremento de $40 para completar la recuperación según la ley 23.966.