Las distribuidoras de gas en Argentina han presentado propuestas de aumentos masivos en las tarifas que podrían entrar en vigor a partir de febrero, buscando un incremento mínimo del 350% en las boletas. Las empresas, en una audiencia con Enargas programada para el 8 de enero, han solicitado también la implementación de un mecanismo de actualización automática basado en la inflación mayorista.
Metrogas, la distribuidora del Área Metropolitana de Buenos Aires, propone un incremento superior al 375%, argumentando un congelamiento tarifario por más de cuatro años. Naturgy, operadora en la Provincia de Buenos Aires, busca una recomposición tarifaria urgente a partir de enero y un mecanismo de actualización basado en el índice de inflación mayorista.
Las demás empresas también han planteado aumentos significativos. Redengas, por ejemplo, busca un incremento promedio de 481%, aunque estiman que esto se traduciría en alrededor del 140% en las boletas de usuarios residenciales. Camuzzi Gas Pampeana y del Sur, Gasnor, Ecogas, Transportadora Gas del Sur (TGS), y TGN han presentado solicitudes que oscilan entre un aumento del 421% y el 573%.
Sin embargo, las opiniones de estas empresas no son vinculantes para la decisión final de Enargas. La entidad destaca que aunque las audiencias permiten la participación ciudadana, la decisión última recae en la autoridad pública.
El atraso tarifario en el sector ha sido resaltado por el Observatorio de Tarifas y Subsidios IIEP de la Universidad de Buenos Aires, indicando que los usuarios pagan solo el 33% del costo de abastecimiento, con el Estado cubriendo el restante 67%. Ante un posible salto del tipo de cambio, estos porcentajes podrían cambiar drásticamente.
Se espera que el proceso de recomposición tarifaria propuesto por el Ministerio de Economía impacte en la reducción del presupuesto destinado a subsidios, representando cerca de un sexto del plan de ajuste total para el año 2024.