El motociclismo argentino está de luto tras la trágica pérdida de Lorenzo Somaschini, un talentoso niño de tan solo 9 años que perdió la vida luego de sufrir un grave accidente durante una competencia del Superbike Brasil en el circuito de Interlagos.
Lorenzo, conocido cariñosamente como «Lolo», había hecho su debut este año en la categoría Junior Cup del Superbike Argentino, destacándose rápidamente por su impresionante habilidad y prometedor futuro en el motociclismo. Su talento y pasión por el deporte lo habían convertido en una de las jóvenes promesas más esperanzadoras del país.
El fatal accidente ocurrió en el desafiante circuito de Interlagos. Durante la carrera, Lorenzo intentó una maniobra conocida como «highside» en la curva más lenta del circuito, Pinheirinho. Según detalló Diego Pierluigi, motociclista e instructor de Lorenzo, «Lolo en la segunda vuelta sufre una caída en la curva más lenta del circuito. Se unieron muchas cosas juntas. La forma de la caída fue un ‘highside’, que es cuando la moto se cruza, se traba y despide al piloto. La caída fue muy lenta, pero Lolo golpeó su cabeza, en la parte baja del casco, la base del cráneo”.
A pesar de la velocidad moderada a la que se desplazaba, unos 40 kilómetros por hora, y de contar con un equipamiento de protección de primera calidad, el joven sufrió lesiones graves que resultaron fatales. Pierluigi enfatizó las medidas de seguridad tomadas: «La moto es de 160 cilindradas, alcanza una velocidad máxima de 120 km por hora. Lolo venía a 40 kilómetros por hora en el momento de la caída. Mantenemos todas las medidas de seguridad. Hay muchos protocolos a seguir para evitar los riesgos».
Pierluigi agregó que Lorenzo tenía todos los elementos de protección de primer nivel, incluido un casco de fibra de carbono y un traje de las mejores marcas, asegurando que todas las medidas de seguridad habían sido revisadas antes de salir a la pista.
El trágico suceso ha dejado un profundo dolor en el mundo del motociclismo y entre todos aquellos que conocían a Lorenzo. Sus allegados y la comunidad deportiva lloran la pérdida de un joven talento cuyo futuro prometía grandes logros