Un asesor pedagógico fue condenado hoy a ocho años de prisión, por ser autor de los delitos abuso sexual simple de un menor de 13 años y abuso sexual con acceso carnal, por no haber podido consentir libremente la acción, como delito continuado. La víctima fue un alumno. Los hechos fueron valorados en el marco de la ley 26061 de Protección integral de los derechos de las niñas, niños y adolescentes.
La sentencia fue rubricada por el juez de audiencia santarroseño, Carlos Alberto Besi, tras la realización del juicio oral. Durante los alegatos de cierre, el fiscal Cristian Casais y la querellante particular, Vanesa Ortiz, en representación de la madre de la víctima, habían requerido diez años de prisión; mientras que el defensor particular, José Ramón Rodríguez, requirió la absolución del imputado.
Besi, en base a la prueba analizada durante los dos días de debate (denuncias, declaraciones testimoniales, informes y pericias), dio por acreditado que sin poder precisar fechas exactas, el acusado en reiteradas oportunidades realizó tocamientos, entre otros actos, en perjuicio de un niño desde que tenía ocho años y hasta los 16. Las agresiones sexuales ocurrieron en distintas viviendas donde residió la familia de la víctima, ya que el acusado se quedaba a dormir en ellas. También se produjeron en el domicilio de este último, porque el niño también pernoctó allí, porque el asesor lo ayudaba con las tareas escolares. El imputado, detalló el magistrado en el fallo, le decía que no dijera nada y que “era un secreto entre ambos”.