• 30/04/2025 09:48

El dólar oficial cerró a $1.230 en el Banco Nación en la primera jornada sin cepo

Abr 14, 2025

En una jornada clave para el mercado cambiario, el dólar minorista en el Banco Nación abrió este lunes a $1.250 para la venta, pero registró una rápida corrección en las primeras horas de operaciones. La cotización descendió inicialmente hacia los $1.190 y finalmente cerró el día en $1.230 (lo que representó una suba del 12% frente al cierre del viernes).

Por su parte, el dólar blue se vendió este lunes con una baja de noventa pesos, a $1.285 en las cuevas del microcentro porteño. En el segmento bursátil, el dólar contado con liquidación (CCL) se negoció a $1.256 (-6,3%), mientras que el dólar MEP operó en $1.253 (-6%).

A partir de ahora, los individuos podrán acceder libremente al mercado de cambios sin límites de monto, tanto de forma presencial como a través de los canales digitales de las entidades bancarias. Esta medida implica el fin del llamado «cepo cambiario», vigente desde hace años, y representa un cambio significativo en la política económica del país.

La eliminación del cepo cambiario en Argentina marca el inicio de una nueva etapa económica, cargada de expectativas y desafíos. Con la apertura del mercado oficial bajo un esquema de flotación administrada entre bandas, el Gobierno busca despejar dudas sobre la sostenibilidad del régimen y restaurar la confianza de los inversores. Para los especialistas, la decisión llegó en un contexto apremiante, luego de una aceleración inflacionaria mayor a la esperada y crecientes presiones cambiarias que generaban un clima de desconfianza. En ese sentido, las medidas adoptadas apuntan a corregir el principal desequilibrio que afectaba al programa económico: el atraso del tipo de cambio.

Especialistas coincidieron en que el nuevo esquema permite una mayor flexibilidad, al tiempo que elimina restricciones que distorsionaban el funcionamiento del mercado de cambios. Los analistas señalaron que el uso de los Bopreales como herramienta para contener los pasivos acumulados contribuye a moderar el riesgo de una sobrerreacción inicial del dólar. Además, la expectativa de un fuerte ingreso de divisas por parte de organismos internacionales y líneas de financiamiento le da al Banco Central un respaldo de liquidez significativo para afrontar esta transición con mayor solidez.