Un proyecto, sin dictamen, propuesto por Hernán Lombardi resultó rechazado. Pero Juntos por el Cambio comprometió a los jefes de bloques a firmar una solicitud para que el tema se debata en el recinto el próximo 23 de agosto.
En una discusión caliente, la cuestión de la Ley de Alquileres, no prevista en el temario de este jueves, fue traída al recinto de la Cámara de Diputados por la oposición, que en un primer intento fracasó en que se trate un proyecto sobre tablas que propone su derogación, pero que, en segundo término, logró poner contra las cuerdas al oficialismo para que se solicite una sesión especial para debatir el tema el próximo 23 de agosto.
Todo comenzó con un pedido de apartamiento del reglamento planteado por el diputado macrista Hernán Lombardi, que requería de las tres cuartas partes, y resultó rechazado con 102 afirmativos, 113 negativos y 9 abstenciones.
Tras esa votación, el jefe del bloque radical, Mario Negri, tomó la palabra. “Esto no es demagogia, cinismo ni aprovechamiento electoral”, afirmó y pidió una moción para que, por simple mayoría, se vote convocar a una sesión especial para el próximo 23 de agosto, después de las PASO. Entonces, se abrió un debate reglamentario que lo tuvo como protagonista a él y al presidente del Frente de Todos, Germán Martínez.
Cuando el acuerdo parecía no aparecer, la secretaria parlamentaria del bloque oficialista, Paula Penacca, explicó que ya que esa forma de convocar a una sesión no figuraba en el reglamento, “si la oposición quiere hacer una sesión especial con este tema que presente las diez firmas, que usted (a la presidenta) va a tener la obligación de convocar, pero que se pongan de acuerdo si van a querer tratar allí el proyecto del diputado Lombardi o si van a querer tratar el dictamen de mayoría y minoría”, en referencia a los textos que ya tienen despacho de comisión y nunca se llevaron al recinto.
A continuación, la secretaria parlamentaria de Juntos por el Cambio, Silvia Lospennato, propuso “circular por las próximas dos horas un pedido de sesión especial” que “vamos a someter a la firma de todos los presidentes de bloques de esta Cámara. Entonces va a quedar claro qué bloques lo quieren tratar”. Y dio tiempo de que se firme esa solicitud hasta las 18, por lo cual se postergó la votación de la moción de Negri.
Posiciones encontradas
Al proponer el tratamiento de su proyecto de derogación de la Ley 27.551, Lombardi anticipó: “Vamos a hacer esto todas las veces que haga falta para reflexionar un poco dónde estamos parados. A tres años de la vigencia de la Ley de Alquileres, hay valores que subieron un 600%. Los inquilinos están absolutamente sufrientes, porque se retiró la oferta. No hay oferta”.
“Es una ley que no funcionó, nosotros decimos que también contó con la anuencia de nuestro bloque, pero es una catástrofe”, continuó y resaltó que “los inquilinos están angustiados y los propietarios están espantados”. “Por supuesto que el deterioro del salario real, al cual han llevado las erráticas políticas de este desgobierno, no tiene parangón por lo menos en la historia de la democracia argentina”, fustigó.
El macrista habló de que en algunos barrios de la Ciudad, “el aumento intermensual es del 19%” en los alquileres. “Este Gobierno fracasó, no van a poder corregir grandes cosas en los meses que le quedan, lo que podríamos hacer es no agregar sufrimiento al sufrimiento y angustia a la angustia”, reclamó.
Y desafió: “Consulten al presidente (Alberto Fernández), que no ejerce, a vuestra jefa política (Cristina Kirchner), al ministro (Sergio Massa), que además es candidato. Pero sería mejor quizás no consultar a ninguno de los jefes, escuchen a la gente que está sufriendo todos los días”.
Al anunciar la abstención del interbloque Federal, la diputada Graciela Camaño observó que “hay un cinismo tan grande en el debate de este tema. ¿Qué es lo que pretendemos? ¿Hacerle creer a los inquilinos que los defendemos de un lado y del otro?”. “Nadie tiene la fórmula mágica para la resolución de los alquileres. Ahora, si enserio queremos debatir la Ley de Alquileres, seamos democráticos, traigamos la orden del día la recinto, se vota y el que gana, gana”, aseveró.
Otra de las que tomó la palabra fue la legisladora de Buenos Aires Libre Carolina Píparo, quien criticó que “es un desastre esta ley sumado al desastre económico que está haciendo el oficialismo”, pero cargó contra Juntos por el Cambio por “venir ahora cuando se pasaron un año explicándome por qué no se podía derogar la ley. Hoy es oportunismo electoral”. “Por supuesto que voy a acompañar porque quiero derogar la ley y defiendo a los inquilinos”, completó.
El jefe del interbloque Provincias Unidas, Luis Di Giacomo, cuestionó la “burda maniobra electoral, propia de estos tiempos, proviniendo de alguien de los sectores llamados extremos o duros”. Y, al recordar el consenso que había tenido la oposición en el dictamen de minoría, reprochó que luego desde ese sector de Juntos por el Cambio “propusieron una liberalización absoluta del tema, y quedó claro que fue imposible que podamos avanzar”.