Un remisero de 66 años fue asesinado de un balazo en la cabeza por delincuentes que le robaron el auto cuando llegó a la casa de un amigo junto a su esposa para saludarlo por su cumpleaños, en la localidad bonaerense de José C. Paz, informaron hoy fuentes policiales y judiciales.
El hecho ocurrió ayer las 19.40 en las calles Mayagüez entre Fragata Sarmiento y La Habana, del barrio Urquiza, de la mencionada localidad del noroeste del Gran Buenos Aires, donde la víctima, identificada como César Roberto Ortega, había llegado junto a su mujer a bordo de su auto para saludar a un amigo que cumplía años.
Según las fuentes, en esas circunstancias Ortega fue interceptado por al menos dos ladrones que llegaban a pie, que estaban vestidos con ropas deportivas y que lo amenazaron para robarle su Renault Megane gris modelo 2001, que utilizaba para trabajar como remisero.
La víctima quiso resistirse y no les dio las llaves del auto, momento en que uno de los asaltantes le gritó «callate porque te pego un tiro» y, tras un forcejeo, lo mató de un balazo en la cabeza, añadieron los voceros.
Tras ello, los dos asaltantes abordaron el auto de la víctima y huyeron del lugar, donde quedó la mujer de Ortega ilesa, ya que logró correr hasta la esquina y resguardase del ataque.
El hecho quedó registrado en una cámara de seguridad privada en la que se observa cuándo el matrimonio se acerca con su vehículo, dobla para su izquierda para agarrar la calle dónde vive su amigo y en ese momento son vistos por los dos delincuentes, que rápidamente se abalanzan sobre el auto apuntándoles a las víctimas.
El remisero fue trasladado al hospital Mercante de José C. Paz, aunque al llegar los médicos constataron que ya había fallecido debido a la lesión que presentaba en la cabeza.
Sobre el caso, el yerno de la víctima, Kevin Arias, dijo a Télam que según contó la esposa de Ortega «fue todo muy rápido y lo mataron por un auto que usaba para trabajar».
«Los dos bajaron del auto y se fueron para el portón de la casa porque habían ido a festejar el cumpleaños de su amigo don Garay y lo mataron», relató el familiar.
«Inmediatamente los abordan dos masculinos, uno de ellos a punta de pistola, y les refieren que les den las llaves del auto, a lo cual Roberto se niega. Tienen un forcejeo y, mientras la mujer golpeaba más fuerte el portón del señor Garay pidiendo auxilio, el delincuente efectúa un disparo y lo mata», agregó la mujer.
Arias dijo que la familia espera que los vecinos que puedan aportar imágenes de cámaras de seguridad de las casas vecinas se acerquen para ayudar en la investigación para que los asesinos sean localizados.
Esta mañana, Héctor, el amigo al que Ortega había ido a saludar, contó al canal C5N que éste había ido a visitarlo por su cumpleaños: «Él salió de la casa del pibe y vino. No me avisó nada y me quedé adentro…cuando llegó afuera siento que gritaba la esposa de don Roberto. Ella gritaba ´lo afanan, lo afanan´, pero cuando salgo Roberto ahí tirado».
Finalmente, el amigo relató que «la policía llegó rápido, pero la ambulancia nunca llegó».
«Todavía la estamos esperando», dijo.
El hecho es investigado por la fiscalía 22 descentralizada de Malvinas Argentina, a cargo de Alejandra Burgés, quien ordenó diversas medidas de pericias y diligencias, entre ellas el análisis de las cámaras de seguridad de la zona con el fin de identificar a los autores del asesinato.
«Hasta el momento el Renault Megane no fue localizado ni se han identificado a los sospechosos», explicó a Télam un vocero judicial.
En tanto, aún se desconoce si fueron halladas en la escena del crimen vainas servidas o bien, los delincuentes utilizaron un revólver para cometer el ilícito.
La fiscal intentó ayer a última hora tomarle declaración testimonial a la esposa de Ortega, principal testigo del homicidio, pero la mujer se encontraba en estado de shock, por lo que la diligencia se pospuso para cuando esté en condiciones de relatar lo sucedido.
Por su parte, la representante del Ministerio Público también aguarda los resultados de autopsia al cuerpo de Ortega, que se realizará entre hoy a la tarde y mañana a primera hora, para establecer la causa de la muerte.