Las altas temperaturas se sienten en la ciudad, en el campo, y muchas personas están cambiando el tradicional mate por tereré, una bebida fría que es elegida sobre todo, en esta época.
“El tereré, lo que tiene bueno, es que es un potente antioxidante que protege al sistema cardiovascular. Disminuye la cantidad de colesterol malo, mejora la tolerancia la glucosa y tiene un efecto protector de los vasos sanguíneo”, mencionó en una ocasión Nelly Schindler, una reconocida química farmacéutica chilena.
En este marco,consejos otorgados por el Instituto Nacional de Yerba Mate (INYM) para preparar el mejor tereré y sorprender a tus amigos y familia.
Elegí frutas cítricas
Aunque se puede elegir cualquier jugo de frutas para saborizar el agua, las que mejor se adaptan y aportan un plus de frescura son las cítricas: pomelo, naranja, lima o limón van a ser siempre las aliadas perfectas de un buen tereré.
Agregale un toque de hierbas
Se puede agregar al agua: menta, hierba buena, cocú, cedrón, boldo,, burrito, etc. La canela y el clavo de olor, también son una buena elección y maridan muy bien con determinadas frutas.
Tipo de Yerba
La yerba ideal para el tereré debe tener un porcentaje mayor de palo y hojas sin tanta molienda. Se debe buscar en las góndolas las que dicen “Para tereré” o “saborizadas”.
Que no falte el hielo
Cuando sube la temperatura, el hielo no debe faltar. Puede ir en el vaso o en la jarra o termo.
Compartirlo con amigos
El INYM destaca que, al igual que el mate tradicional, el tereré también es sinónimo de rondas con amigos. Así que no te falten amigos ni tereré
Más tips
• Primera cebada: cebarlo generosamente. Dejar reposar un tiempo hasta que el jugo o el agua drene hacia abajo para asegurarse que gran parte de la yerba se moje, pero no toda.
• Introducir la bombilla hasta abajo, ubicándola sobre la pared del mate. Se le pueden agregar unos cubos de hielo.
• Si sos el cebador, no olvidar que los mates para el tereré requieren más agua o jugo que el mate tradicional.
• Se puede usar un mate de vidrio, cerámica o un vaso de metal o vidrio.
La cantidad de yerba debe ser más bien poca, al contrario del mate caliente, ya que se busca disfrutar del sabor del jugo más que del mate.
Por último, al servir hacerlo lentamente, sobre los cubos de hielo que están dentro del vaso, créanme, hace la diferencia. Es muy importante que todo esté lo más frío y lleno de hielo posible.
A medida que el hielo se vaya derritiendo, el jugo se irá “aguando”, por eso es aconsejable usar medio sobrecito de jugo al principio y más adelante agregar la otra mitad.
Por Solana Sumantico