Luego de que el presidente Javier Milei apuntara contra los gobernadores por el traspié en el Congreso que significó el regreso a comisión del proyecto de Ley Ómnibus, varios mandatarios provinciales se pronunciaron al respecto y defendieron su postura tras ser acusados de «traicionar a sus votantes».
Sergio Ziliotto, gobernador pampeano, aseguró que «una cuota parte de la caída de la ley se debe a la movilización de la gente para luchar por su propio futuro». «Hubo una coherencia en el movimiento obrero, se dejaron de lado las diferencias y hubo unidad», sostuvo, en declaraciones a Futurock.
«No me siento incluido en la denuncia, agravio, a lo que ha planteado el Presidente contra algunos gobernadores pero está en el marco del destrato del gobierno nacional para las provincias», señaló, consultado sobre las expresiones de Milei. «Pareciera que el voto de Milei es calificado y el de los gobernadores es de segunda», amplió.
El comunicado publicado por la cuenta oficial de la Oficina del Presidente comenzó con una amenaza a los gobernadores y legisladores que no acompañaron el megaproyecto al indicar que el Gobierno «no va a permitir que quienes hace años se benefician de un sistema corrupto y empobrecedor, frustren el futuro de todos los argentinos»