Un acuerdo entre dialoguistas y el kirchnerismo permitió la media sanción de una nueva fórmula para actualizar jubilaciones en base a la inflación y un 8,1% de recomposición extra.
La Cámara de Diputados de Argentina dio media sanción a una nueva fórmula de actualización jubilatoria, fruto de un acuerdo entre la oposición dialoguista y el kirchnerismo. La nueva fórmula actualiza las jubilaciones mensualmente según el Índice de Precios al Consumidor (IPC) y agrega una compensación adicional del 8,1% para cubrir el desfasaje inflacionario de enero.
El proyecto, aprobado con 162 votos a favor y 72 en contra, garantiza que el haber mínimo cubra la canasta básica del adulto mayor, fijada en aproximadamente $260.000, con un mínimo equivalente al 109% de esta canasta para evitar desfasajes en los aumentos.
El debate en torno al rol del Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) de la ANSES fue el punto más conflictivo. Los dialoguistas querían usarlo para pagar juicios previsionales y deudas con cajas provinciales, mientras que el peronismo se opuso firmemente. Finalmente, se acordó que los pagos se realizarán con tributos específicos para la ANSES, sin tocar el FGS.
El proyecto también incluye un adicional anual del 50% de la variación entre el RIPTE y el IPC para mejorar las jubilaciones en contextos de crecimiento económico, evitando que el IPC actúe como techo.
La aprobación no estuvo exenta de críticas y advertencias sobre el costo fiscal del proyecto, estimado en 0,43% del PBI. Desde el oficialismo, se advirtió que el presidente Milei podría vetar la ley debido a la falta de fondos disponibles para financiar mayores aumentos a los jubilados.