La abogada Patricia Croitoru expuso que Jorge Mangeri, condenado por el femicidio de Ángeles Rawson, pretende regresar a Buenos Aires «porque está lejos de su familia».
«En enero de este año fue trasladado a Rawson por cuestiones operativas del Servicio Penitenciario. Ahora él no solo está lejos de su mujer, sino también de su familia», explicó la letrada. Además, Croitoru adelantó: «Estamos instrumentando una medida y la próxima instancia son los estudios que hace el Servicio Penitenciario Federal».
«Todavía no fui a Rawson, pero si hubiese tenido algún problema con otro preso ya hubiésemos presentado algún planteo en particular», agregó, intentando despejar las versiones que indicaban que Mageri había pedido el traslado por problemas de convivencia en el penal.
Jimena Aduriz, madre de Ángeles Rawson, definió al femicida como «un psicópata de libro», durante una entrevista que brindó hace dos años a Migue Granados.
«Otra pregunta estúpida que me dijiste que te hacen es si sospechaste del portero. Obviamente, si hubieras sospechado, la hubieras cuidado de, o hubieras hecho algo para que eso no suceda», le dice el conductor. «Lo hubiera hecho echar», le contestó la mamá de Ángeles Rawson, quien sigue adelante con su vida con el pesar de ya no tener a su hija.
Y agregó: «Después lo cotejé con mis vecinos. Nadie lo podía creer. De hecho, sospecharon de mi marido, porque no podían creer que este hombre fuera capaz de una cosa así».
Finalmente, la madre de Ángeles reveló el peligro que Mangeri significaba para todos los vecinos: «Una vecina mía tenía hijas adolescentes y me dijo: ‘Yo he dejado que él entrara con Emilia chiquita a cambiar la bombita de luz’. Tenía llave de todos los departamentos. Un psicópata de libro», finalizó.
A casi once años del crimen de Ángeles Rawson, Jorge Mangeri pidió dejar el penal federal de Rawson «porque está lejos de su familia». El encargado del edificio en el que vivía la adolescente de 16 años fue condenado en junio de 2016 a prisión perpetua por el asesinato que marcó un antes y un después en la historia de los feminismos argentinos. Mangeri primero intentó atacar sexualmente a Ángeles y, tras su resistencia, decidió asesinarla. Al día siguiente, su cuerpo fue hallado en la planta de la CEAMSE de José León Suárez y se desató una investigación que fue retratada durante meses por todos los medios locales.